Juan Hedo (guitarra y voz) y Adolfo Diaz (bandurria y laúd) actuaron en el Jardín de CEINCE (*) en Berlanga de Duero al pasado 8 de agosto de 2025.
Hacía mucho que quería escuchar a Juan, mi juglar favorito, junto a su compañero Adolfo. Conocí a Juan tocando en la Plaza Mayor de Sigüenza hará más de 10 años, estaba con su guitarra, su silla plegable, su apoyapié, su atril, su micro y su ampli, su mesita con unos libros de poesía propia junto con algunos discos suyos, la funda de la guitarra en el suelo con unas monedas, enfocado a las terrazas amenizando la mañana a los parroquianos y guiris reunidos en tan maravilloso entorno. Así lo reflejé en una reseña de aquel día de sorpresas (La Plazuela. 10 de octubre de 2015. Septiembre: reseñas culturales).

Adolfo y Juan llevan 20 años tocando juntos, cada vez menos pues Adolfo tiene 85 años y hacer kilómetros no es lo más indicado, sin embargo, ahora que por fin lo he conocido, no me da la sensación de tantos años, seguro que la energía de la música le alcanza de lleno y su batería siempre está a tope. Tenía que haber tocado con Juan en El Pósito de Sigüenza el 21 de noviembre de 2015, pero él no pudo venir y lo hizo solo Juan.

En ese maravilloso jardín de la casa señorial de Berlanga, nos instalaron al público (un número restringido, no seríamos 60 personas) con el dúo enfrente y a un lado el fondo del jardín con el castillo de Berlanga por detrás. Después del insoportable calor (37 grados a las 20:00) aquel oasis verde de hierba y árboles invitaba a soñar con cualquier cosa deliciosa musical mientras se iba la luz del sofocante día. Conozco su repertorio, pero en versión Juan solo, y empezaron a tocar “Mis noches sin ti” de Demetrio Ortiz, el mismo de “Recuerdos de Ypacaraí”, guaranias mundialmente famosas, la bandurria de Adolfo hizo la introducción y repicaba delicadamente a cada verso cantado por Juan con sentimiento. Siguieron piezas francesas, como “Padam, padam” de Édith Piaf, mexicana como “La llorona” con preciosa introducción de Adolfo y sentida por Juan, la famosa “Beguin the beguine” de Cole Porter instrumental por Adolfo con la guitarra acompañando, “Dos gardenias”, “El cóndor pasa”, un popurrí de piezas populares de Cebreros en las manos de Adolfo, la reclamada por todos a Juan, “María la portuguesa” de Carlos Cano. Ellos habrían seguido toda la noche pues son dos auténticos juglares, pero había que cerrar y con ganas de mucho más nos fuimos yendo, me despedí de ellos con un abrazo. Por fin había conocido a Adolfo, grande Adolfo. Me volví a Sigüenza despacito, con una luna llena y el campo lleno de corzos, conejos y lechuzas.

Al día siguiente el dúo, que había descansado en La Riba de Escalote (de donde procede la familia de Juan), pasaron por Sigüenza para tomar juntos un café y despedirnos. Adolfo no conocía la ciudad y con suerte lograremos traerlos a cantar y tocar aquí, pues quedó encantado con la magia de los monumentos.
Adolfo, ha sido un placer escucharte y conocerte. Este pequeño artículo va dedicado a ti.
Gracias Adolfo, gracias Juan.
(*) CEINCE: Centro Internacional de la Cultura Escolar
Videos de la actuación:
1 Mis noches sin ti Demetrio Ortiz.
7 Poupurri de piezas de Cebreros.