Llega la estación cálida y hacen su aparición abejas, abejorros, avispas y otros muchos. Su ciclo vital se mantienen hasta que comienzan los primeros fríos del otoño. Con su actividad frenética de flor en flor contribuyen a la polinización de las especies vegetales. Las abejas y avispas suelen convivir en cierta armonía con los seres humanos hasta que por algún motivo se sienten amenazadas y emplean su temido aguijón como arma defensiva, dando por resultado un un encuentro muy desagradable para la pobre víctima.
Las abejas forman colmenas, donde miles de individuos trabajan sin descanso alimentando a la abeja reina y a las crías. De este proceso el ser humano consigue exquisita miel, cera y otros productos. Pero si un día las pequeñas abejas obreras perciben una amenaza no dudaran en clavar su aguijón para defender la colmena. Su aguijón acaba en una especie de arpón y tras la picadura queda anclado en la piel de la víctima y la abeja muere por el desgarro que se produce en su cuerpo al intentar separarse. Por este motivo una abeja sólo puede picar una vez en su vida.
Las avispas suelen vivir en colonias de pocos individuos y son mucho más agresivas que las abejas, pudiendo atacar sin aparente provocación. Su aguijón es liso y puede ser extraído con facilidad para seguir picando al pobre desdichado todas las veces que tenga oportunidad.
Son insectos similares en apariencia y confundidos muchas veces. Su veneno produce reacciones similares aunque tiene composición diferente. Unos consejos al respecto pueden ser de ayuda en la prevención de las picaduras y tratamiento de las mismas:
• El veneno de las abejas tiene una composición ácida, por lo que para neutralizarlo debemos emplear una sustancia alcalina para lavar la picadura, después siempre de extraer el aguijón. Compresas de amoniaco diluido con agua puede disminuir la reacción posterior.
• El aguijón de la abeja hay que retirarlo simpre con cuidado y sin hacer presión pues la glándula de veneno sigue inoculando a la víctima aún después de separarse del abdomen del insecto.
• Sin embargo el veneno de la avispa es alcalino y para ser neutralizado debemos emplear sustancias ácidas como zumo de limón o vinagre.
• El veneno de ambas especies es termolábil, esto quiere decir que se destruye con el calor. Por este motivo cuando acaba de picarnos lo más aconsejable sería aplicar calor exactamente en la zona de inoculación. Podemos emplear un secador de pelo o compresas de agua caliente. Con una temperatura de 50ºC puede ser suficiente, no es necesario acabar con una quemadura. Seguramente cuando nos ocurra no tendremos el remedio a nuestro alcance ...pero echemos imaginación, un metal o un canto rodado que está al sol puede ser un remedio a tener en cuenta.
• Cuando haya pasado los primeros momentos será la aplicación de frío de forma intermitente lo que más calme la inflamación y el dolor.
• La aplicación de cebolla o puerro recién cortado rápidamente sobre la zona disminuirá los síntomas locales posteriores.
• No ponga nunca emplastos de barro del campo ya que puede ser un mecanismo de transmisión de infecciones como el Tétanos. Se puede emplear la arcilla de herbolario que tiene todas las garantías sanitarias.
• Hay que evitar el rascado o masajear de la zona para que el veneno no se propague hacia el interior.
Lo más habitual es que produzcan una reacción local con dolor, picor, inflamación y enrojecimiento que será más o menos grave según el individuo y la zona anatómica donde se haya producido la picadura, así como también el número de insectos que nos han picado. Cuando la zona es cuello, cara, ojos o lengua siempre se debe acudir lo más rápidamente posible a un centro sanitario por ser zonas donde la inflamación puede poner en peligro la salud del individuo.
En casos extraordinarios se puede producir también una reacción exagerada que se acompaña de respiración anormal, inflamación, sensación de ahogo, mareos, escalofríos, vómitos y desmayo. Nuestro organismo está sufriendo un shock anafiláctico y nuestra vida está en peligro si no recibe atención sanitaria urgente. Nadie es alérgico hasta que se hace, pero a partir de ese momento nuestro organismo reaccionará de forma cada vez más brusca ante el contacto con dicho veneno, pudiendo producirse la muerte si no se actúa con la debida rapidez.
Lo primero: prevenir las picaduras
• Evite las zonas donde viven los insectos: colmenas, charcas, fuentes. Sobre todo las avispas son atraídas por aguas tranquilas y estancadas. ¡No las moleste!
• No deje bebidas azucaradas y alimentos en el exterior sin vigilancia. Examine siempre el vaso y su bocadillo antes de llevarlo a la boca si se encuentra en el campo.
• No utilice para pasear ropa de colores llamativos y evite los perfumes con olor floral.
• Viaje con las ventanillas del coche cerradas y en casa utilice mosquiteras en las ventanas.
• En la piscina revise el calzado. Sacuda la ropa y toalla antes de utilizarla de nuevo.
• Evite las zonas de basura o dejar desperdicios de fruta o embutido a su alrededor. A las avispas les atrae el olor de comida y se posarán sobre ella para darse un festín.
• No moleste a los insectos, atacan porque perciben un posible peligro. Si uno de estos bichines se posa sobre usted haga movimientos muy lentos y no lo asuste... pues si se siente en peligro le aguijoneará sin miramientos.
• En caso de que ya le hayan picado se retire de ese lugar ya que liberan unas sustancias (feromonas) que atraen a otros congéneres en su ayuda. Retire a los animalillos fallecidos pues atraen con su olor a otros individuos al entierro.
• Si usted es realmente alérgico al veneno de estos insectos debe llevar siempre consigo en la estación cálida un Kit de tratamiento que consiste en una jeringuilla de autoinyección de adrenalina para administrársela inmediatamente. Si no se actúa de forma rápida quizás no tenga el tiempo suficiente para recibir atención médica.
• En las personas que sólo se produce una reacción local leve no es necesario aplicar inyecciones de corticoides y antihistamínicos. La aplicación de frío y alguna pomada calmante son suficientes .
Si clavado tienes aguijón …
una abeja te picó.
Cuando pica varias veces …
