Pedro A. Olea Álvarez

Frecuentar archivos y bibliotecas siempre trae novedades para la historia seguntina. Mis visitas regulares al Archivo Secreto Vaticano enriquecen nuestro patrimonio cultural y este pasado mes de marzo he encontrado una nueva curiosidad sobre el personaje que puso las banderas.

Se trata de una carta al cardenal Secretario de Estado, escrita en Lisboa el 27 de mayo de 1589, por un cierto mons. Biglia que era el colector de la Cámara en el reino portugués de Felipe II, o sea la persona que recogía los dineros portugueses que habían de viajar a Roma. De su carta nos interesa un solo párrafo que dice:

“/…/ Esta noche pasada don Sancho Bravo, capitán de arcabuceros a caballo, ha cogido a un espía, enseguida llevado al castillo y atormentado, pero no se sabe lo que hayan podido obtener . /…/”1

Podemos pues ver que el espionaje es tan viejo como el mundo pero que en este caso la noticia hubo de tener particular relieve pues salió del teatro de operaciones para llegar a Lisboa y también en la capital portuguesa circuló por lo menos en los ambientes oficiales dado que un enviado vaticano la considera suficientemente importante para informar al más alto nivel. De manera que tenemos otro dato sobre la actividad militar de quien nos dejó las banderas.

Pero regresando de Roma a Madrid, en la biblioteca de la Real Academia de la Historia he encontrado un curioso documento también sobre las banderas y la capilla del Doncel.

Dice sobre la capilla de San Juan y Santa Catalina que “ay una tabla con pergamino debajo de dos banderas que ay en la capilla y dize la tabla estas dos banderas se ganaron a los Yngleses a cinco días del mes de junio del año de 1589 estando sobre la ciudad de Lisbona su campo por D. Sancho Bravo Arce de Laguna, cavº de la orden de Alcantara, señor de Molin de la Torre y capn. de Cavallos por el Ymbictisimo Rey Don Phelipe Nuestro Señor, Segundo de este nombre, Patron desta Capilla del Glorioso y vienabenturado San Juº y santa Cathª y como tal Patron las mandó poner en ella. Pusieronse dia de Nª Señora de las Candelas año de 1590. Ase de decir una Missa Cantada en cada un año y Visperas”.

Luego habla de una lápida en el banco del retablo y de la inscripción y esculturas de la portada de la capilla, y prosigue: “y en la dicha capilla que confina con la torre del Santísimo ay un güeco y dentro una cruz pequeña de piedras de arena y su tapa de la misma piedra y dentro de ellos solo ay la choquezuela del huesso porque lo demás del, por el discurso del mucho tiempo está echo polvos los cuales reluzen mucho y se parece que fue de bolsa texida de oro y plata y en seda, por los fragmentos que se reconozen y aze dos años que por andar en una obra, viendo que sonava  güeco y por la curiosidad hize  quitar las piedras vivas que lo tapa y también por el verso siguiente que tiene dicha piedra viva Hic est inclussa Joszelini Presulis Ulnas. Mariana lo trahe no con estas letras por tercer obispo de Sigüenza”.2

Esta documentación de la Academia nos informa que el tercer patrono de la capilla, por muerte de don Juan de Mendoza, fue don Juan Antonio Bravo de Arce, natural de Berlanga, casado con doña Antonia Maldonado, natural de Ocaña. Tuvieron en Berlanga a doña Ana Bravo de Arce, natural de Berlanga y patrona de la capilla seguntina y a Sancho Bravo de Laguna y Acuña, del hábito de Alcántara. Fue su sucesor Luis Bravo de Arce y de Acuña, del hábito de Alcántara, e Isabel de Garoan Luxano tuvieron a María Bravo de Arce, natural de Cisneros de Campos, que con Fernando de Prado, natural de León y regidor perpetuo de la ciudad, tuvieron a Fernando de Prado Cisneros y Girón Bravo de Laguna y Arce, marqués de Prado y don Pedro su hermano. 

No son mucho estas dos breves noticias pero ya se sabe que la historia se hace pasito a pasito y por eso hoy los ofrezco al lector.

Pedro A. Olea Álvarez

1. ASV, Segreteria di Stato, Spagna, 36, f. 133-134.

2. R.A.H. 9/319, f. 51v y 52: Descendencia de Juan Antonio Bravo de Arce hasta su tercer nieto Fernando de Prado Cisneros y Bravo, II marqués de Prado.

Imagen:  La bandera de Drake antes de su restauración